martes, 30 de marzo de 2010

La noche oscura del alma de San Juan de la Cruz


1. En una noche oscura,
con ansias, en amores inflamada,
¡oh dichosa ventura!,
salí sin ser notada
estando ya mi casa sosegada.

2. A oscuras y segura,
por la secreta escala, disfrazada,
¡oh dichosa ventura!,
a oscuras y en celada,
estando ya mi casa sosegada.

3. En la noche dichosa,
en secreto, que nadie me veía,
ni yo miraba cosa,
sin otra luz y guía
sino la que en el corazón ardía.

4. Aquésta me guiaba
más cierto que la luz de mediodía,
adonde me esperaba
quien yo bien me sabía,
en parte donde nadie parecía.

5. ¡Oh noche que guiaste!
¡oh noche amable más que el alborada!
¡oh noche que juntaste
Amado con amada,
amada en el Amado transformada!

6. En mi pecho florido,
que entero para él solo se guardaba,
allí quedó dormido,
y yo le regalaba,
y el ventalle de cedros aire daba.

7. El aire de la almena,
cuando yo sus cabellos esparcía,
con su mano serena
en mi cuello hería
y todos mis sentidos suspendía.

8. Quedéme y olvidéme,
el rostro recliné sobre el Amado,
cesó todo y dejéme,
dejando mi cuidado
entre las azucenas olvidado.
Comentario: una joven sale a escondidas de su casa
y va a reunirse con su enamorado. Se dirige hacia la luz de su amor
hasta el lugar de la cita, allí la pasión de los dos culmina;
a continuación se duermen.
Adrián Guimerá 3º

1 comentario:

Anónimo dijo...

Que Horror de Comentario enserio crees que un Sato Místico hundido en la experiencia de Dios, escriba Poesía de una manera tan simplona, esto es en realidad una experiencia espiritual, la amada es el alma y el amado es Dios el ama anhela estar con el así que sale a su búsqueda esa necesidad tan terrible en la vida, se llama Noche Obscura, y nada mas encuentra descanso cuando muere y reclina el Rostro sobre su amado... El único y verdadero Amante que es Dios que ama sin Condición pero hiere al alma a su paso.