Cuando era joven fui militar castellano llegué a ser conocido en las guerras por mi gran valentía.
Serví muchos años a la Corona y lo daba todo en las batallas para defender y extender los terrenos de mi Corona.
Mi mote en guerra era: Ni miento ni m´arrepiento.
Cuando ya era todo un adulto me casé con la hermana de mi madrastra, doña Guiomar, con la que fui muy feliz.
Mi querida madre murió cuando yo era muy pequeño y mi padre, al cual le tenía un gran respeto y una gran admiración, murió unos años después cuando yo ya era más mayor.
El motivo de la muerte de mi querido padre fue el cáncer, una enfermedad que le fue comiendo la cara poco a poco.
Su muerte me golpeó muy fuerte y me provocó un gran dolor, por eso, en honor a su memoria empecé a escribir mi obra.
Esta obra es una de mis obras más importantes, como estaban dedicadas a la memoria de mi padre su título fue : LAS COPLAS A LA MUERTE DE SU PADRE.
-Este largo poema es una elegía que se cierra con un elogio a la figura de mi padre don Rodrigo, que me dejó un gran vacío en el alma.
Hablo de la muerte desde un punto de vista cristiano manifestando el dolor que siento por la pérdida de mi amado padre. El recuerdo de mi ser querido y su fama, sus buenas obras en la vida, introduciendo la posibilidad del consuelo, frente al tono fúnebre que poseen algunas composiciones medievales.
Está compuesta por cuarenta estrofas, llamadas coplas de pie quebrado o coplas manriqueñas.
Cada estrofa está formada básicamente por versos de ocho y cuatro sílabas con rima consonante, utilizo rimas de arte menor para dignificar a la poesía.
Además de las coplas, escribo poesía cortés de tema amoroso, propia de los cancioneros de mi época .
Firmado: Nicoleta Badea y Goran Roxana de 3ºA
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